Entrevista a su Gerente, Francisco Senra.
Por Víctor Fernández
¿Cuándo se creó la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla?
La actividad para la creación de la Orquesta comenzó el uno de marzo de mil novecientos noventa y a lo largo de diez meses se trabajó en todos los frentes necesarios para la puesta en marcha de esta agrupación sinfónica: la contratación del director titular, la convocatoria de selección de profesores, las audiciones, las obras de acondicionamiento de la sala de ensayos y conciertos, la compra de instrumentos y un sinfín de labores que permitieron que el concierto inaugural tuviera lugar el diez de enero de mil novecientos noventa y uno en el Teatro Lope de Vega de Sevilla.
¿Quiénes contribuyeron a su fundación?
Sevilla ha contado a lo largo de su historia con muchas instituciones públicas y privadas que, a través de la enseñanza o de la ejecución y organización de actos musicales, han logrado que se desarrolle una sólida afición musical. La importancia de la actividad musical de la Catedral de Sevilla y de las casas ducales, las temporadas líricas (existentes ya en el siglo dieciocho en teatros y corrales de comedias), la inauguración del teatro San Fernando a mediados del diecinueve (pareja a la del Liceo de Barcelona) que ofreció por más de un siglo una rica actividad operística junto a otros teatros de la ciudad, la Orquesta Bética de Cámara y después la Orquesta Bética Filarmónica, la Sociedad Sevillana de Conciertos, Juventudes Musicales, la Escuela de Música de la Sociedad Económica de Amigos del País y, después, el Conservatorio Superior de Música, además de otras muchas, conformaron a lo largo de siglos este movimiento cultural sevillano. Esta afición, fruto de una tradición musical incuestionable, creó la necesidad de contar con una agrupación sinfónica de un alto nivel artístico. Pero, estos elementos existían a lo largo de muchos años sin que se actuara consecuentemente y sin que se dotara a la ciudad de un instrumento eficaz y un lugar apropiado para desarrollar en las mejores condiciones posibles su programación. No fue hasta el año mil novecientos ochenta y nueve cuando, por la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla, se tomó la iniciativa, definiéndose un proyecto adecuado a la realidad musical de la ciudad. La construcción, al mismo tiempo, del Teatro de la Maestranza redondeó esta idea.
¿Dónde realiza la orquesta sus actividades principalmente: ensayos, conciertos, etc.?
Los ensayos tienen lugar en la Sala Apolo, un antiguo cine que se remodeló para ser utilizado como sala de ensayos y de conciertos. Y así fue hasta diciembre de 1992, momento en que la actividad concertística se trasladó al Teatro de la Maestranza, aunque la primera ubicación siga siendo utilizada para los ensayos y otras actividades: conciertos para escolares, música de cámara, algunas grabaciones, etc..
Al margen de Andalucía, ¿qué otros ámbitos territoriales pueden disfrutar de la orquesta sevillana? ¿Y en el extranjero?
En el ámbito nacional hemos actuado en Albacete, Barcelona, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Madrid, Murcia, Santander, Santiago de Compostela, Toledo y Valencia, así como en todas las capitales andaluzas y en un considerable número de localidades de nuestra región.
En el extranjero hemos visitado Berlín, Lisboa, Roma, San Juan de Puerto Rico, Stuttgart, Viena y Wiesbaden.
¿Qué directores y solistas han colaborado con la ROSS?
Superadas las novecientas actuaciones en estos diez años, es imaginable la cantidad de artistas destacados que podríamos ofrecer. Este tipo de citas siempre provoca malestar en quien las hace porque parece que se quiere destacar a algunos y obviar a otros. Pero, por señalar a algunos de los más populares, mencionaríamos, en la voz, a Álvarez, Aragall, Arteta, Bayo, Berganza, Caballé, Carreras, Cid, Domingo, Kraus, Lorengar, Orán, Pons… También a Bowman, Danz, Dawson, Donath, Ewing, Freni, Furlanetto, Gasdía, Ghiaurov, Graves, Halfvarson, Kovat, Krause, Kuhlmann, la Scola, Mattilla, Nielsen, Nucci, Opie, Quasthoff, Raimondi, Schemtschuck, Verret… y a los Coros Nacional de España, de la RTVE, Orfeón Donostiarra, Asociación de Amigos del Teatro de la Maestranza, CajaSur de Córdoba, Universidad Politécnica de Madrid, Coro de Valencia, Gachinger Kantorei Stuttgart, BBC Singers, King’s Consort, The Choral Academy of London, Escolanía del Real Monasterio de San Lorenzo del Escorial…
Como solistas instrumentales citaremos a los españoles Achúcarro, Guijarro, Los Romero, Orozco, Perianes, Polo, Torres Pardo… y entre los extranjeros a Buchbinder, Geringas, Gutman, Kliegel, Maisky, Mustonen, Thunemann, Tureck, Williams, F. P. Zimmermann, T. Zimmermann, Znaider,…
Por último, diremos que han colaborado con la Orquesta la inmensa mayoría de los directores españoles citando, a modo de ejemplo, a Encinar, Frühbeck, García Navarro, Gómez Martínez, López Cobos, Ros Marbá o Victor Pablo y Badea, King, Lombard, Magg, Marin, Rilling, Shallon, Temirkanov o Vasary, en el caso de los extranjeros.
¿Qué prepara la Sinfónica de Sevilla para la celebración de su 10º Aniversario?
Como antesala de esta efemérides hemos ofrecido los días 22 y 23 del pasado mes de diciembre dos conciertos extraordinarios con la interpretación de «El Mesías» en la modalidad de concierto participado, con la intervención de un coro formado por doscientas personas. Estas personas proceden de diversos coros y de un número de participantes individuales que han acudido a esta innovadora convocatoria. Esta experiencia, habitual en otras partes del mundo, y nacida en nuestro país en Barcelona hace unos años, se está extendiendo a diversas ciudades españolas gracias al entusiasmo de Mari Carmen Palma y su equipo, así como por el patrocinio de la Fundación la Caixa. Coincidiendo con el décimo aniversario de la inauguración del Teatro de la Maestranza ofreceremos también un concierto extraordinario el próximo 2 de mayo.
Otras actividades previstas son la edición de un libro sobre la Orquesta, mesas redondas, una importante gira y otras actividades que se desarrollarán a lo largo del presente año.
¿Cuáles están siendo las líneas generales de la presente temporada? ¿Cuáles son sus notas destacadas?
La ausencia de titular nos movió a contar con tres directores que ya habían trabajado con la Orquesta con resultados excelentes, invitándoles a un total de nueve programas de los diecisiete que forman en esta temporada el ciclo de abono: Badea, Lombard y López Cobos. De esta forma se ha cubierto el número de programas que habría realizado un titular si hubiésemos contado con él. Otros maestros como Frühbeck, Gloria Isabel Ramos, Juan Luis Pérez, José Ramón Encinar, Pehlivanian, King, Francis, Jurowski y Traub completan la lista de directores en la temporada de conciertos. En el foso contamos con Miguel Ángel Gómez Martínez, Plácido Domingo, Stefanelli, Prado, Weikert y Guingal. De entre los solistas destacaremos a Maisky, a Leonel Morales y a un genial Nicolaj Znaider (atención a este nombre para los que no lo conozcan), junto a primeras voces con las que actuamos tanto en el foso como sobre el escenario.
Además de la clásica temporada de conciertos, ¿qué otras actividades desarrolla el conjunto de la orquesta fuera de este ámbito?
En la presente temporada se interpretan cuatro títulos de ópera, dos de ópera de cámara, un ballet, dos títulos de zarzuela, un programa de orquesta y órgano, conciertos institucionales, conciertos para escolares, grabaciones, un ciclo de música de cámara…
¿Dónde se encuentran más satisfechos los profesores: en el foso o en el escenario?
Sería difícil establecer una respuesta unitaria a esta pregunta y no sería justo globalizar una opinión sin contar con los matices individuales de cada profesor. Pero, en conjunto, se puede asegurar que los músicos están satisfechos cuando la obra que interpretan es de un alto nivel o, sobre todo, si cuentan con un director que es capaz de conseguir lo máximo de la partitura y de ellos mismos. Quiero decir con esto que no es tan importante el lugar como lo que se esté haciendo y en la forma en la que se haga. De todos modos la Orquesta se beneficia, artísticamente hablando, de esta doble actividad: la interpretación de un repertorio sinfónico de altura le proporciona una calidad interpretativa superior a la media de las orquestas que sólo interpretan repertorio lírico y, por otro lado, la obligada ductilidad con la que ha de contar una orquesta en el foso pendiente de unas indicaciones del director, que pueden ser más cambiantes que las del repertorio concertístico por la necesaria concertación con los cantantes o bailarines, la convierten en una orquesta que responde con mucha prontitud y facilidad a cualquier indicación del maestro en cualquier programa sea cual sea el papel que juegue.
¿Qué lugar ocupa la música española en los atriles de la ROSS?
Un lugar importante aunque todos sabemos que la producción sinfónica española, para gran orquesta, no es extensa. Pero, si sirve de muestra la presente temporada, hacemos tres estrenos absolutos y un concierto exclusivamente dedicado a algunos de nuestros compositores actuales. De cincuenta obras que componen nuestra programación de abono, doce lo son de autores españoles. Tampoco debemos olvidar cinco representaciones de «El dúo de la africana» y de «La patria chica».
¿Qué tipo de estrenos efectúa la formación sevillana?
Anualmente se estrena la obra ganadora del Premio de composición «Joaquín Turina» que convoca con la misma periodicidad el Ayuntamiento de Sevilla. La orquesta ha realizado algunos encargos a lo largo de estos diez años y estamos abiertos a ofrecer novedades, tanto españolas como de compositores extranjeros. Los límites están marcados por el criterio que han manifestado nuestros directores titulares y por la necesidad de establecer una progresiva introducción en la temporada de abono para un público que, en gran parte, no está abierto a un tipo de repertorio de vanguardia.
El último ha tenido lugar el día 15 del mes pasado. Se trata precisamente del premio «Joaquín Turina» 1999, que recayó sobre la obra «Requiem sine verbis» de J. M. Echevarría.
¿Qué futuro se vislumbra para la ROSS?
Esperanzador y siempre ascendente, aunque cada vez resulta más difícil superar niveles.
La expectación que creó la presentación de la Orquesta, su colaboración inmediata con determinadas actividades en el Teatro de la Maestranza con motivo de su inauguración, programación pre Exposición Universal de 1992 y en la propia muestra, la rápida salida al extranjero y la excelente opinión que de su calidad se tiene por muchos y buenos directores y solistas del panorama nacional e internacional, la han colocado en ese lugar en el que se le mide cada interpretación, cada programa que ejecuta o cada maestro que la dirige. Se le exige más que a otras formaciones, incluidas las extranjeras que nos visitan, y somos conscientes que en ningún momento se nos está permitida la relajación, y los profesores obran en consecuencia.