Reseña | D’AMORE: Music for viola d’amore, piano y theremin

Un pianista y compositor canario y un intérprete ruso de viola d’amore se juntan para visibilizar un instrumento poco conocido, y menos aún extendido entre el panorama de la música contemporánea. Toda músicaha sido encargada expresamente para este proyecto, y cuenta con algunos de los compositores canarios y rusos de mayor renombre y trayectoria en la actualidad.

Incluso tratándose de música contemporánea, la viola d’amore mantiene aquí su esencia original, puesto que es un instrumento originario de la época barroca. No deja de sorprender el uso de las cuerdas de tripa en músicas tan actuales, y es que la tripa proporciona un timbre cálido que, junto a las cuerdas simpáticas, define el sonido característico de este instrumento.

Las tres primeras pistas son composiciones del pianista Gustavo Díaz-Jerez. Dhyâna es una suerte de contraposiciones entre el orden y el caos en un diálogo constante entre ambos instrumentos. Los recursos de la viola d’amore quedan aquí ampliamente exprimidos, desde la dulzura de su timbre hasta los efectos armónicos producidos por el arco, expresivos pizzicati o los curiosos arpegios que el hecho de tener siete cuerdas ofrece. Phase Space nos enseña la otra cara del instrumento, a solo, así como en Monologue.

Si las anteriores obras huyen en cierto modo de la clásica tonalidad, el álbum va adquiriendo otro cariz con obras como Iluzia, del compositor ruso KuzmaBodrov, moviéndose entre los universos tonales y modales, con un claro tema que se va transformando.

Muchas de las composiciones desvelan un espíritu retórico, destacando Ist diez etwa der Tod? de Laura Vega, una reflexión sobre la muerte vertebrada, aunque no de manera tonal, en torno a la nota Re.

La última obra despierta la curiosidad del oyente y amplía el discurso que el álbum viene manteniendo. In Whims of the Seaes una obra de la misma Lydia Kavina, quien aquí interpreta el theremin. Esta composición está inspirada en el Océano Atlántico rodeando la isla de Tenerife, con multitud de efectos programáticos tales como el sonido de las aves, las olas o la evocación de los efectos de la luz sobre el mar en calma.

Por: Enrique Pastor Morales