La 4.ª edición del Raimat Arts Festival consolida su propuesta con una programación más amplia y una mayor penetración en el tejido cultural de la región. Pedagogía, sostenibilidad e impacto social son algunas de las líneas de trabajo principales, a las que este año se suma un destacado elenco integrado por Alba Carmona, Ellinor D’Melon, Ignacio Prego o Carme Garrigó.
Por Manuel Pacheco
¿Bajo qué premisas nace el Raimat Arts Festival?
El Raimat Arts Festival nace en 2022 de la mano de Elena de Carandini, fundadora de la Fundació Comunitària Raimat-Lleida, con el propósito de convertirse en escaparate, a través de la música, de todas las iniciativas que impulsa la fundación durante el año. El festival surge con la convicción de que la música clásica puede ser una herramienta transformadora para la comunidad y el territorio. Nuestro objetivo es combinar excelencia artística con compromiso social, regeneración territorial y sostenibilidad (somos el primer festival water positive del mundo), articulando cultura con impacto real, tanto social como medioambiental.
¿Cómo toma forma y qué instituciones lo apoyan?
El festival está promovido por el Castell de Raymat y vinculado directamente a la Fundació Comunitària Raimat-Lleida. Contamos con el apoyo institucional del Ajuntament de Lleida, Turisme de Catalunya y de patrocinadores como La Roca Village, Fundación Banco Sabadell o Raventós Codorníu, entre otros.
¿En qué entornos diversos se celebran los conciertos del festival?
Con la voluntad de mostrar Raimat en toda su plenitud, las actividades se celebran en múltiples escenarios de la localidad. Los conciertos principales tienen lugar en las bodegas modernistas de Raimat, mientras que la música antigua se escucha en la iglesia modernista del pueblo. Además, dentro de la serie ‘Indrets’, organizamos conciertos en el Castillo de Raymat (que data del siglo XII), así como en las viñas, plazas y rincones emblemáticos. Queremos acercar la música a los habitantes de Raimat y, al mismo tiempo, dar a conocer el pueblo a todos los visitantes que nos acompañan durante el festival.
¿Vuestra programación se centra en algún estilo musical concreto o está abierta a diferentes propuestas?
La programación se centra principalmente en música clásica y contemporánea, así como el repertorio barroco interpretado con criterios historicistas en el caso de los conciertos dominicales celebrados en la iglesia modernista. Sin embargo, mantenemos una mirada abierta a nuevos estilos y propuestas. Este año, por ejemplo, incluimos por primera vez un concierto fuera del ámbito clásico con la cantaora Alba Carmona. Nuestra idea es seguir explorando fusiones y formatos innovadores en futuras ediciones, siempre con la música clásica y barroca como núcleo. Además, nos interesan especialmente los proyectos que dialogan con la palabra, las artes escénicas o los discursos contemporáneos. Buscamos propuestas con alma, conexión y modernidad capaces de llegar a públicos diversos.
Bajo la bandera de la música, el festival también persigue ‘la transformación del entorno a través de las artes’. ¿Qué relación planteáis entre los conciertos y el territorio en el que se desarrollan, y qué iniciativas lleváis a cabo para dejar huella en la comunidad?
El impacto social es uno de nuestros pilares. Colaboramos con entidades como el Centre Ocupacional La Torxa y Apropa Cultura para garantizar que colectivos vulnerables puedan asistir gratuitamente a conciertos e incluso participar en actividades educativas. Además, todos los beneficios del festival se destinan a los proyectos de la Fundació Comunitària Raimat-Lleida, que incluyen formación profesional, inserción social, regeneración ambiental y becas culturales que impulsan residencias artísticas.
¿En qué se materializa vuestro hermanamiento con el Festival Napa Valley de California?
En su primera edición en 2022, el Festival Napa Valley diseñó el programa artístico y compartió con nosotros su visión: conectar dos territorios vitivinícolas a través del arte y la filantropía. Este hermanamiento ha creado un puente cultural entre California y Lleida, y tenemos la ilusión de seguir generando nuevas sinergias tanto en Raimat como en Estados Unidos.
¿Qué artistas han pasado por la programación a lo largo de estos tres últimos años?
Hemos contado con artistas de referencia como el Cuarteto Casals, Keiran Campbell, Forma Antiqva, Albert Guinovart, Serena Sáenz, Pablo Sáinz-Villegas, Francisco Fullana o Sophia Bacelar, entre otros.
¿Qué feedback habéis recibido de su parte acerca de la organización y la dinámica del Raimat Arts Festival?
El feedback de artistas y público es fundamental para nosotros. Queremos que ambos sientan el deseo de volver: que los intérpretes encuentren un ambiente cercano y cuidado, y que el público disfrute no solo de la música, sino también del espacio único, de la programación y de la experiencia gastronómica del Taste of Lleida. Nuestra ambición es que el Raimat Arts Festival se convierta en una cita imprescindible en sus agendas.
En cuanto a la edición actual, ¿qué propuestas podrán disfrutarse y por qué consideráis que será ‘más ambiciosa’ que las anteriores?
La edición de este año, celebrada del 2 al 5 de octubre, se amplía a cuatro días y presenta un cartel ambicioso: Alba Carmona, Ellinor D’Melon, Ignacio Prego, el pianista y musicólogo Luca Chiantore y la percusionista Carme Garrigó, entre otros. Habrá más escenarios, un programa educativo reforzado y la consolidación del Taste of Lleida con más de treinta productores locales.
Además de la programación de conciertos, ofrecéis actividades para acercar la música a todos los públicos. ¿Qué rol ocupa la pedagogía en vuestro ideario, y qué labor didáctica desarrollaréis en esta 4.ª edición?
La serie ‘Indrets’ nace con la vocación de derribar barreras entre artista y público: no existe un escenario fijo ni un repertorio preestablecido. Cada concierto se concibe como una experiencia irrepetible compuesta por el lugar (indret), el intérprete, la comunidad y la naturaleza. En la pasada edición, el violonchelista estadounidense Keiran Campbell interpretó de forma íntegra las seis suites de Bach en espacios singulares.
Para esta edición, contamos con la percusionista multidisciplinar Carme Garrigó, que ofrecerá seis conciertos gratuitos en escenarios únicos, desde viñedos hasta el Castell de Raymat, pasando por rincones emblemáticos del pueblo y su entorno. Además, el pianista y musicólogo Luca Chiantore presentará una conferencia-actuación dedicada a la figura del pianista leridano Ricard Viñes en la Casa de la Vila, y colaboraremos por primera vez con el Centre de Titelles de Lleida, que llevará al Castell de Raymat su espectáculo ‘Hathi’.
Nuestra apuesta por el talento joven se refuerza con una clase magistral gratuita en el Conservatori Professional de Música de Lleida, impartida por una de nuestras artistas invitadas, Ellinor D’Melon. Finalmente, nos enorgullece anunciar un acuerdo de colaboración con el Concurso Internacional de Piano Ricard Viñes de Lleida. A partir de la próxima edición, el Raimat Arts Festival acogerá un recital con ganadores de ediciones anteriores del certamen, con el objetivo de promover el talento joven internacional, reivindicar la figura de Ricard Viñes y poner en valor la ciudad y la cultura de Lleida.
El festival supone una oportunidad para dar a conocer la región e impulsar su crecimiento económico. ¿Qué función tienen esas iniciativas celebradas de manera paralela a los conciertos, como el encuentro de productores locales organizado bajo el título de Taste of Lleida?
El Taste of Lleida reúne a más de treinta productores locales que ofrecen cocina de proximidad durante la cena-cóctel en las bodegas. Es un escaparate de la riqueza agrícola y gastronómica de la región, que se vincula a la música en una experiencia sensorial única, sostenible y socialmente responsable.
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